Este miércoles, la Corte Suprema de Justicia rechazó y calificó como inadmisible un pedido de recusación presentado por siete de los ocho rugbiers condenados por el crimen de Fernando Báez Sosa contra los integrantes de la Sala II de la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal de Dolores, que formaron parte del proceso judicial del caso.
«El recurso extraordinario, cuya denegación originó esta queja, es inadmisible (art. 280 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación)», se argumentó en la resolución tomada por los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti sobre la presentación del abogado Hugo Tomei.
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Los jueces indicaron que la desestimación de un recurso bajo esta norma «no implica que se confirme ni se afirme la justicia o el acierto de la decisión recurrida». El imputado Enzo Comelli fue el único que no participó de la solicitud.
Fue el 22 de marzo de 2024 cuando la Cámara de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires confirmó las condenas para los rugbiers, momento en el que los jueces de la Sala II, Fernando Mancini y María Florencia Budiño, determinaron que el asesinato de Báez Sosa fue cometido con premeditación y con la participación de dos o más personas, según el artículo 80 del Código Penal.
Tras la sentencia, cinco de los jóvenes recibieron prisión perpetua (Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Luciano Pertossi) y los restantes recibieron 15 años de prisión (Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi).
Por su parte, la Cámara ratificó las sentencias del Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Dolores, aunque indicó que no hubo alevosía en el crimen. Sin embargo, la premeditación se mantuvo como agravante, por lo que las condenas permanecieron sin cambios.
El fallo significó un revés para la defensa de los jóvenes, desde donde se había planteado que el crimen debía considerarse un homicidio en riña, lo que habría implicado una disminución de la pena.
El caso Fernando Báez Sosa
Fernando Báez Sosa murió durante la madrugada del 18 de enero de 2020 tras ser atacado con golpes de puño y patadas por un grupo de jóvenes rugbiers con quienes había tenido una discusión dentro del boliche «Le Brique» de Villa Gesell.
La titular de la Unidad Fiscal de Investigaciones N° 6, Verónica Zamboni, acusó al grupo de ocho adolescentes de cometer el crimen, argumentando que todos ellos «acordaron darle muerte a Fernando Báez Sosa en virtud de un altercado que tuvieron dentro del boliche».
«Minutos después, cumplieron con su palabra: lo asesinaron. Para ello aprovecharon la distracción de la víctima -que, tal como surge de las declaraciones testimoniales, ya había dado por terminado el conflicto y consumía tranquilo un helado-, y golpearon a sus amigos para evitar que éstos lo defiendan», indicó la fiscal.
Posteriormente, la causa fue elevada a juicio el 4 de febrero de 2021, por el titular del Juzgado de Garantías N°6 de Dolores, David Mancinelli, quien acusó al grupo de «homicidio doblemente agravado por su comisión por alevosía y por el concurso premeditado de 2 o más personas en concurso ideal con el delito de lesiones leves».
AS/LT