Liga Profesional: Vélez consiguió su anhelado primer triunfo
Con muchos juveniles, el conjunto dirigido por el interino Bravo -que hacía 800 minutos que no sacudía redes- pudo vencer recién a partir de la expulsión de Iacobellis y un gol de Braian Romero, a quien le habían anulado otro en la primera parte.
A la espera de llegar a un acuerdo con Guillermo Barros Schelotto, Vélez Sarsfield batió 1-0 este viernes en Liniers a San Martín de San Juan, en el inicio de la fecha 9 de la Liga Profesional.
Con muchos juveniles, el local salió a buscarlo de entrada, aunque poco a poco los sanjuaninos emparejaron el control de juego. El primer grito llegó a partir de un mal pase de Cáseres, una rápida recuperación en mitad de cancha y la generosidad de Carrizo en ceder el balón a Braian Romero para el gol, que a la postre fue anulado por un offside finito.
Así las cosas, el equipo de Antuña se plantaba ante su anfitrión. Y lo hacía de manera correcta, agazapado de contra ante un posible error de la última línea velezana e incluso poniendo mucha gente en campo contrario cuando avanzaba con intención ofensiva.
Con Bouzat pivoteando y la presencia arriba de Montoro y Bosch, créditos de la inferiores, Vélez seguía empujando. Así, el lateral Gordon profundizó por su flanco, pero el centro no pudo ser aprovechado por Romero, primereado por el arquero Borgogno.
Pero San Martín se animaba. Marchiori contuvo un cabezazo de Anselmo y luego Iacobellis sacó un zapatazo de zurda a la salida de un corner que salió apenas alto.
Ya en el complemento, Marchiori volvió a lucirse ante un remate de Iacobellis y en el rebote Anselmo no pudo. En la réplica, una incursión de Elías Gómez por izquierda acabó con un pase profundo a Carrizo, que tras un mal control no pudo definir ante Borgogno, que enseguida se quedó con un disparo de Bosch tras una linda jugada de Montoro.
San Martín respondía con dos ocasiones de Tomás Fernández y un cabezazo de Cavallaro tras gran gestión de Iacobellis, quien enseguida vio la roja por un planchazo a Bouzat.
Con un jugador más, el DT interino Bravo metió más pibes en cancha, pero fue el experimentado Romero el que, tras 800 minutos sin convertir goles, le dio la anhelada primera victoria del torneo al último campeón del fútbol argentino.