A pocos días del 14 de febrero, las proyecciones indican que el gasto promedio de los argentinos en San Valentín será de $35.600, reflejando un importante aumento en comparación con 2024. Según un informe de la consultora Focus Market, las experiencias lideran como la principal opción de regalo, representando el 38% de las preferencias, seguidas de restaurantes y bares (26,8%), otros regalos (11%) y perfumería (7,5%).
Entre las experiencias más demandadas, el informe destaca los siguientes costos:
Día de Spa para dos personas: $118.260 (+146% vs. 2024). Incluye masajes, spa facial, ducha escocesa y un brindis (duración de 1 hora y media).
Noche en hotel con cena y spa: $410.000 (+52% vs. 2024). Este paquete incluye cena de 3 pasos, desayuno, spa, piscina, masajes y espumante de bienvenida.
Escapadas en avión (3 días/2 noches):
Mar del Plata: $715.416 (+68% vs. 2024).
Puerto Iguazú: $836.085 (+79% vs. 2024).
Salta: $1.143.916 (+61% vs. 2024).
Estas opciones incluyen vuelos y estadías en hoteles de 3 estrellas, con variaciones en el equipaje permitido según el destino.
En cuanto a la gastronomía, una cena de 8 pasos con maridaje de vinos para dos personas en un hotel reconocido de Buenos Aires tiene un precio de $180.000, representando un incremento del 64% frente al año pasado.
Regalos tradicionales también más caros
Para quienes opten por regalos clásicos como flores, bombones o peluches, los precios también han sufrido importantes aumentos:
Docena de rosas largas: $40.000 (+70% vs. 2024).
Ramo surtido (flores silvestres, rosas y lilium): $30.000 (+88% vs. 2024).
Bombones (8 unidades, 100 g): $15.900.
Peluche «Te amo» (50×30 cm): $43.000.
Combo Peluche + Flor + Caja de bombones: $65.000.
Los desayunos personalizados, una opción en auge, tienen precios que varían entre $25.700 y $79.320, dependiendo de los detalles incluidos. Por ejemplo, un desayuno de $39.580 puede traer una bandeja de madera, jarro de cerámica, café, té, medialunas, muffins, brownie, torta de chocolate y más.
Damián Di Pace, director de Focus Market, comentó que «el Día de los Enamorados ha impulsado notablemente el consumo en el sector de servicios, como restaurantes, hoteles, spas y escapadas». Además, resaltó que este año, al caer un viernes, el fin de semana completo se presenta como una oportunidad comercial para los sectores más demandados.
Di Pace también señaló que «las experiencias están ganando terreno frente a los bienes materiales, ya que los consumidores están más inclinados a gastar en actividades que puedan disfrutar, utilizando tarjetas de crédito y aprovechando cuotas sin interés».
Aunque los precios han subido considerablemente, San Valentín sigue siendo una fecha clave para el consumo, donde tanto las experiencias como los regalos tradicionales tienen su lugar en la celebración del amor.