El empresario pesquero Raúl “Tato” Cereseto denunció que le rompieron un vidrio de su camioneta y le robaron una mochila, en cuyo interior había una computadora portátil con información valiosa. El asalto ocurrió en la puerta de su casa, en el barrio San Benito de Trelew.
Durante la mañana de este jueves, Cereseto contó lo ocurrido en las redes sociales y ofreció una recompensa para recuperar lo robado. “Más allá del daño material, la pérdida principal es el contenido guardado en la notebook, que incluía no solo los borradores del libro que el empresario estaba escribiendo, sino también la tesina correspondiente a su especialización en Derecho Ambiental, material de estudio valioso y diversos archivos de trabajo”, explicó.
Horas más tardes, volvió a realizar un posteo en sus redes, aunque en esta ocasión no se limitó a relatar lo ocurrido, sino que puso de manifiesto la frustración que tiene tras convertirse nuevamente en una víctima de la inseguridad.
Un famoso empresario del Chubut sufrió un violento robo y ofreció una recompensa inmediata
X de Tato Cereseto
“Siempre creí que el robo anterior había sido el último. Siempre creí, pero me equivoque…y anoche me asaltaron por décima segunda vez. Sí, leyeron bien, ya me robaron ‘una docena de veces’. Y acá estoy, nuevamente, haciendo la denuncia, respondiendo las mismas preguntas, escuchando las mismas palabras: ‘Vamos a hacer todo lo posible’. Pero lo peor es que ya vaticino cómo terminará esto. Y lo sé porque lo viví muchas veces. Nunca antes apareció ni me devolvieron nada. Ni una vez”, lamentó el empresario.
Murió una mujer de Comodoro tras chocar de frente contra un vehículo en La Pampa
A pesar de la bronca, aseguró que no se resigna. “Quiero creer que esta vez va a ser diferente. Que alguien va a mirar las cámaras en serio. Que van a buscar de verdad. Que la policía cambió, que las instituciones funcionan, que hay un plan, que a alguien le importa. Quiero creer que no somos apenas un número más en una estadística que ya nadie lee. Pero me lo están haciendo muy difícil”, reconoció.
Luego aseguró que “cuando te roban tantas veces, algo se quiebra dentro tuyo” y remarcó que lo más doloroso es “es la sensación de estar viviendo en un lugar donde esforzarte no sirve, donde cuidarte no alcanza, donde trabajar honestamente te convierte en blanco fácil”.
También se refirió a las palabras que suelen pronunciarse cada vez que una persona es víctima de un robo: “Me cansé de escuchar que ‘es así’, que ‘hay que tener cuidado’, que ‘la cosa está difícil’. Y lo peor es que nos estamos acostumbrando. No quiero acostumbrarme. Quiero creer que podemos vivir sin miedo. Que podemos volver a casa tranquilos. Que podemos dejar algo en el auto sin que sea una invitación al desastre”.
Brutal ataque en Comodoro: un hombre mayor fue mordido por un perro y golpeado con una cadena por su dueño
Por último, sostuvo: «Hoy, más que nunca, creer me duele. Creer cansa. Creer parece un acto de ingenuidad más que de esperanza. Y sin embargo acá estoy, escribiendo esto, diciéndolo en voz alta, porque si dejo de creer del todo, si me resigno, si acepto que esto es normal, entonces ya perdimos todos. Así que sí: quiero y elijo creer. Aunque me lo estén haciendo imposible”.