Sedujo a cuatro brasileños y les prometió presentarles a sus amigas

Compartir:

El típico engaño de la viuda negra apela directamente al ego masculino. Una o dos chicas que se animan a irse con uno que se siente un galán, o al menos dos. Pero, hasta ahora, nunca que las superen en número. El sueño de la fiesta privada, de una noche de locura, quizá un poquito cercana a lo que se ve en las películas; está a un paso y eso erotiza al más precavido.

Y si a eso se le suma que el alcohol (también drogas) consumido previamente en el boliche donde se conocieron, o en la espera para envalentonarse si el match es por una aplicación, disminuye los reflejos, los hombres terminan siendo presas aún más fáciles para este tipo de ladronas que saben conquistar y hacerlos sentir sexies y atrevidos. Más aún si son extranjeros.

Pero hecha la ley, hecha la trampa. Y ante las señales de cuidado de las viudas negras de parte de los países de origen de los extranjeros cuando viajan a Argentina, y también de varios boliches que en los baños hasta pusieron advertencias, algo así como que no te creas Brad Pitt si dos chicas se te regalan; las ladronas que eligen esta modalidad van reinventando sus engaños, se profesionalizan y les dan un poquito de confianza extra para que caigan en la trampa.

Y eso fue con lo que se encontraron cuatro brasileños. Tienen 34, 37, 41 y 55 años y el sábado del fin de semana del Día del Amigo fueron a bailar a un boliche del barrio porteño de Palermo, según las fuentes del caso consultadas por Infobae. Allí conocieron a C.P.Z., de 26 años, pelo lacio y largo y uñas que podrían despertar más de una fantasía.

Ella sola sedujo a los brasileños con una propuesta más que tentadora: cambiar números de celular y arreglar para verse en la semana. Les dijo que iba a llevar amigas. Al día siguiente, ya les estaba escribiendo para verse ese mismo domingo Día del Amigo. Insistió hasta que lo consiguió.

La única cuestión es que uno de los brasileños no podía porque se iba a ver con una chica que había conocido y entonces quedaron en ser sólo tres parejas. Las mujeres tocaron timbre en el edificio de la calle Esmeralda al 900, en el barrio porteño de Retiro, donde las esperaban sus víctimas el domingo por la noche.

Cuando entraron al departamento, se encontraron con que al final eran cuatro los brasileños: el que había hecho un plan por su cuenta lo había dejado de lado para ir a la fiesta privada que terminó siendo un sueño placentero gracias a los estupefacientes que las viudas negras pusieron en los tragos.

Pero les fallaron los cálculos a las ladronas. O la droga no alcanzó para todos; o no quisieron pasarse de dosis; o los tres cómplices a los que les abrieron la puerta para desvalijar el departamento tardaron. Lo cierto es que los brasileños se despertaron ya en la madrugada del lunes pasado y se encontraron en pleno robo.

Fuentes del caso dijeron que dos mujeres y los tres cómplices lograron escapar, pero entre el encargado del edificio y uno de los brasileños pudieron atrapar a una de las viudas negras en el hall del edificio: C.P.Z..

De inmediato llamaron a la Policía de la Ciudad y, desde entonces, está presa, acusada de robo bajo la modalidad viuda negra.

También puede interesarte

El Loco Gatti: la muerte no lo hizo bueno, lo hizo eterno

Hugo Orlando Gatti muri este domingo 20 de abril, a los 80 aos. No fue una noticia inesperada:...

Venden el histórico penthouse del edificio Kavanagh: cuánto cuesta

El histórico penthouse del piso 14 del edificio Kavanagh está nuevamente en venta. Ubicado en la...

Compraste en Shein? Esto es lo que tarda en llegar tu pedido y así podés rastrearlo

Luego de que el Gobierno Nacional flexibilizara las políticas para importar productos a la Argentina, algunos...