La vuelta de Ángel Di María a Rosario Central causó un verdadero revuelo en las redes y entre los hinchas. El anuncio sorpresivo impulsó la demanda por la camiseta con su nombre y número, que se convirtió rápidamente en un artículo codiciado por los simpatizantes auriazules.
El exjugador del Real Madrid y Paris Saint-Germain lucirá en su espalda el dorsal 11, un clásico para él, y apenas trascendió la noticia, comenzaron a formarse largas filas frente a la tienda oficial del club, donde los fanáticos buscan asegurarse la camiseta de uno de los ídolos históricos del club.
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Los seguidores que pasaban por el local oficial, que abre sus puertas a las 10 de la mañana, intentaban reservar la casaca titular o la alternativa, ambas con el apellido “Di María” estampado en la espalda.
Además, muchos otros que ya habían comprado camisetas sin nombre a principios de mes aprovecharon para acercarse y estampar el número 11 del mediocampista campeón del mundo en Qatar 2022.
El precio para adquirir la camiseta nueva con el nombre y número del “Fideo” es de 155.000 pesos argentinos, y se puede abonar mediante cualquier medio de pago disponible. En cambio, quienes ya poseen la camiseta oficial y solo quieren estampar el apellido y dorsal, deberán pagar 55.000 pesos.
Para quienes quieran conseguir la casaca personalizada, es importante tener paciencia, dejar sus datos en la tienda oficial del club y esperar a ser contactados a partir del lunes próximo para coordinar la entrega.
Los números de Ángel Di María en Rosario Central
Antes de ser transferido al Benfica en 2007, Di María disputó 39 partidos oficiales con la camiseta de Central, en los que marcó seis goles y dio dos asistencias. Su debut profesional fue el 14 de diciembre de 2005, cuando ingresó desde el banco ante Independiente en Avellaneda, en un empate 2-2, reemplazando, en aquella oportunidad, a Emiliano Vecchio.
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Su primer gol en Primera llegó el 24 de noviembre de 2006, en una victoria por 4-2 frente a Quilmes en el Gigante de Arroyito. En esa ocasión, convirtió apenas un minuto después de haber ingresado por Leonardo Borzani en el entretiempo, demostrando desde temprano su capacidad para cambiar partidos.
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