En un duro comunicado, la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (CAPIP), alertó sobre la manipulación de la información en torno al conflicto pesquero. Advierten que resulta necesario que se tomen medidas para dar continuidad a la actividad, sin poner en riesgo a las empresas y las fuentes de empleo
El texto completo del comunicado:
Es necesario que la comunidad en su totalidad sepa que las empresas pesqueras del país se encuentran cumpliendo con sus obligaciones salariales e
impositivas, abonando los básicos de convenio al personal de flota y la garantía horaria al personal del Stia. NO SE ESTA INCUMPLIENDO NINGUNA LEY. No se sale a pescar para no incrementar más las pérdidas operativas de las
empresas y aumentar el riesgo de cierres, quiebras y pérdidas de puestos de
trabajo. El llamado a prospección se declaró desierta, ya que solo un fresquero se presentó, y hacen falta por lo menos 4 buques, sin prospección no se podría abrir zonas a la pesca, NO CONFUNDAN MÁS A LA GENTE.
Hace tres años que venimos advirtiendo que la baja de demanda y de precios ponía en riesgo la actividad. Los que hoy se muestran sorprendidos son
quienes no supieron, o no quisieron escuchar, minimizaron los mensajes de
ayuda que se solicitaban como la emergencia pesquera para reducir parte de los costos internos. Tampoco es cierto que se resuelve con una mal difundida rebaja salarial, hay que bajar todos los costos de la cadena que los forma: impuestos, tasas, costo de energía, combustible, retenciones, transporte, estiba, puerto, proveedores y mano de obra en general. Hay que refundar la actividad, ajustarla a nuevos paradigmas comerciales y de consumo. Hasta que no se resuelva la mayoría de los ítems que forman el costo, seguramente no habrá actividad general vinculada al langostino.
La actividad tuvo y tiene un efecto de rebalse en las economías locales y
provinciales muy importante, como todos confirman. Una actividad con salarios por encima de los petroleros y uno de los mas altos del país, esto gracias a que el mercado demandaba el producto y pagaba precios altos. Hoy no es así, se terminó, reemplazan con langostino de cultivo que es mucho más barato.
Esperamos que todos los que forman parte de la cadena de costos lo entiendan
y trabajemos en conjunto para morigerar el impacto que esta crisis tiene y va a tener sabiendo que todos y cada uno vamos a tener que ceder, en post del
mantenimiento de la actividad vinculada al langostino. Y deberemos ser todos,
sin excepciones.
No fuimos improvisados, lo anticipamos, enviamos mensaje a todos y no
nos creyeron, perdimos dos años, no perdamos más tiempo. Hagamos las
reformas de costos que permitan dar continuidad a la actividad.
HABLEMOS CON PROPIEDAD SIN DEMAGOGIA