Franco Colapinto, el joven piloto argentino, encara su segunda temporada en la máxima categoría del automovilismo, la Fórmula 1, con un rol renovado. Tras unirse a la escudería francesa Alpine, el oriundo de Pilar asumirá el papel de piloto de reserva, un paso crucial en su carrera.
Si bien no formará parte del dúo principal de pilotos, integrado por Pierre Gasly y Jack Doohan, Colapinto estará presente en el paddock durante todo el fin de semana de cada Gran Premio, como es el caso del GP de Australia.
Su función principal será estar preparado para subirse al monoplaza en caso de que alguno de los pilotos titulares no pueda participar.
La posibilidad de que Colapinto participe en una carrera este fin de semana en Australia, o en cualquier otro, depende de circunstancias extraordinarias. Alguna lesión, enfermedad o accidente que impida a Gasly o Doohan estar presentes sería la única vía para que el argentino ocupe su lugar.
Colapinto es el primero de los cuatro pilotos de reserva del equipo, por lo que tendría prioridad en caso de ser necesario.
La labor de Franco Colapinto durante los fines de semana de carrera
El trabajo de Colapinto comenzará desde las primeras prácticas libres del viernes hasta el domingo, manteniéndose alerta y listo para cualquier eventualidad. Su presencia en el paddock no pasará desapercibida, ya que las cámaras de la transmisión oficial de la F1 suelen enfocar a estos pilotos emergentes, como ocurrió recientemente con Liam Lawson en Red Bull.
Un paso importante en su carrera
El rol de piloto de reserva es un paso fundamental en la carrera de Colapinto hacia la Fórmula 1. Le permitirá familiarizarse con el funcionamiento de un equipo de F1, aprender de los pilotos titulares y estar preparado para una posible oportunidad de competir en la máxima categoría del automovilismo.
SP