Una mujer de 72 años protagonizó un desopilante momento en la entrada de una tienda, hasta que uno de los trabajadores escuchó sus gritos de ayuda y acudió a asistirla. Por suerte, no sufrió heridas y todo derivó en una divertida situación, que fue captada por las cámaras de seguridad de la zona y se volvió viral en las redes sociales.
Anne Hughes, residente de Gales, en Reino Unido, fue la protagonista de esta insólita historia. La mujer de 72 años se jubiló hace siete, pero continuó como limpiadora en una tienda desde entonces. Este lunes 4 de marzo, fue un día distinto para la empleada, debido a que vivió un desenlace inesperado.
Se trató de un suceso a la entrada de la tienda Best One, ubicada en Tonteg, en Thondda Cynon Taf. La mujer se encontraba en la puerta del local cuando su abrigo se quedó enganchado en la persiana. Para su mala suerte, la cortina de metal comenzó a subir y Anne quedó suspendida en el aire.
Todo quedó registrado por las cámaras de seguridad de la zona, que revelaron el momento en el que Anne Hughes despega los pies del piso contra su voluntad, mientras la persiana del local comienza a deslizarse hacia arriba y tira de su abrigo a la vez. La mujer se niega a soltar el carrito de compra que lleva y gira hasta quedar prácticamente bocabajo.
Al principio, los empleados que se encontraban dentro de la tienda en ese momento no escucharon los gritos de ayuda de Anne, pero finalmente uno de ellos se dio cuenta y acudió a rescatarla. “Me di cuenta de que me quedé atrapada, pero nadie podía oírme gritar”, señaló la protagonista de esta historia a BBC.
Así, el trabajador corrió a socorrerla y la sostuvo mientras trató de devolverla al piso, cuando descendió levemente la persiana para facilitar la ayuda. Tras permanecer varios segundos en el aire, Anne pudo bajar gracias a que su compañero desenganchó el abrigo.
El video logró más de dos millones de reproducciones
El local compartió el video del divertido momento en su perfil de TikTok y consiguió hasta el momento más de dos millones de reproducciones. Anne Hughes aseguró que no sufrió ninguna herida durante el suceso y relató cómo vivió la situación.
“Solo recuerdo decirle [al empleado que la ayudó]: ‘Agárrame por la cabeza’. Tenía miedo de caerme porque estaba bocabajo”, señaló. En tanto, bromeó sobre su fama conseguida a través de la viralización del clip y destacó que no volverá a acercarse a las persianas del local: “Aprendí la lección. Anoche estábamos cantando ‘Fame’ con todos mis contactos por chat en Facebook y fue desternillante”.
Además, la mujer aseguró que recibió advertencias previas sobre el peligro de acercarse a las persianas. “Mi jefe dijo que nunca le gustó que el personal camine por ahí”, apuntó.
En tanto, la tienda aprovechó el momento y la repercusión del video en redes sociales y posteó una divertida publicidad en su perfil de Facebook. “No te quedes colgado como Anne y acércate para aprovecharte de alguna de nuestras ofertas. ¡Lo único que sube son nuestros trabajadores, no nuestros precios!”, bromearon.
LA NACION